Por su parte la Curadora, Rosana Sodano, en Su lugar en la familia de las cosas sostiene Anabel Martinez […] nos introduce en su mirada, a través de su personal lenguaje visual, acerca de esta libertad femenina y por qué no de todo Ser Humano.

Hallar en el Olvido es un libro que nos invita a ser parte. La artista, tanto a través de sus obras como a través de sus textos, nos invita a participar, nos deja pensando, nos impulsa a reflexionar.

Nos introduce y, a veces, nos confronta de un modo contundente con temas trascendentes, y delicados, inherentes al ser humano.

Hallar en el Olvido es un libro vital. Pero también habla de la posibilidad de encontrar en cada instante de nuestro existir algo maravilloso, algo que con nuestro accionar puede ser modificado, transformado, aunque el contexto no siempre sea favorable. En su texto La mirada, un primer acercamiento, la Galerista, Adriana Budich hace una excelente caracterización del modo de trabajo de la artista, “La mirada es el primer acercamiento al “objeto encontrado”, con el cual ya se genera un vínculo. Luego en la soledad del taller surge una comunicación y la explicación del porqué.

Por su parte, el Licenciado en Marketing Carlos Cassese, en Arte y Marketing, enhebrados por la Creatividad, hace alusión al potente espíritu creativo e inventivo de la artista, evidenciado en el trabajo realizado en su serie de intervenciones de objetos de merchandising y de publicidad, donde la innovación también es un elemento fundamental. La presente publicación cierra con un texto de Luciana García Belbey Nada se pierde, todo se transforma.

Allí expresa y destaca la maestría con que Anabel Martínez revive objetos. Cómo a través de su práctica artística les posibilita un verdadero rescate del olvido y una completa resurrección.

Según la Real Academia Española, entre otras definiciones, hallar es hacer lo necesario para conseguir algo, o, hacer lo necesario para que ocurra algo. No creo que exista mejor manera de retratar a la artista, a su libro y a su producción artística. Hallar en el Olvido nos habla a corazón abierto, nos interpela. Quien tenga ganas de conmoverse, pensar, reflexionar y, por qué no, embarcarse en una aventura de autodescubrimiento, no puede dejar de leer el libro.